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Por la unidad de investigación de GENTE

¡TOLEDO SACÓ LAS GARRAS!

¡
¿Y así quiere ser Presidente?

"Presidencia", según una de las acepciones de la Real Academia de la Lengua Española, significa "dignidad o cargo de Presidente". Pero esta cualidad parece convertirse en un concepto muy amplio y difícil de compatibilizar con la tan cambiante personalidad de Alejandro Toledo. Y es que este personaje representa, justamente, todo lo opuesto al mínimo de requisitos de un candidato a la primera magistratura de cualquier país del mundo, mucho menos de nuestro país que, últimamente, ha venido sufriendo los estragos de caldeados, tensos y confusos días por su culpa.

Sólo basta dar una mirada a su actitud, no sólo a sus contradicciones o mentiras, sino precisamente a sus reacciones ante quienes se atreven a cuestionarle o sinceramente expresarle algún defecto u error que él o cualquier otro integrante de su partido haya cometido. Suele responder con violencia, con intolerancia y, sobre todo, lo que es peor, con oídos sordos. Es más, a su cúmulo de reiteradas mentiras le añade otras tantas, sin importarle a quién pueda hacer daño, todo con el único fin de salir libre de "polvo" y paja.

¿Realmente creerá Toledo que se puede tapar el sol con un dedo? Si se lo cree, ante tan obvias evidencias, habría que considerar que está mal de la cabeza, lo que lo torna en alguien muy peligroso. Aunque eso le serviría, siendo ésa la excusa perfecta de cualquier villano para evadir sus responsabilidades posteriores, ¿no?

No es concebible cómo Toledo tilda de ser partícipe de una guerra sucia a todo aquél que saque a la luz las verdades que él escondía. Estrategia simplona: tú me acusas y yo te culpo de guerra sucia. No solamente decimos esto por el reportaje revelador de Caretas (dicho sea de paso, nos alegra que nuestros colegas, a pesar de las varias discrepancias que hemos tenido con ellos a través de nuestra historia, le hayan puesto los puntos sobre las íes al candidato de Perú Posible). Sino que nos parece injusto que nadie recuerde o mencione lo que sucedió con GENTE, uno de los pocos medios de comunicación que reveló sin miedo y denunció hace ya un año varias mentiras e intentos de chantaje de Toledo. Por supuesto que esto nos llevó a ser acusados de ser autores de una "guerra sucia", no sólo por Toledo y su gente, sino por varios de los que hoy se rasgan las vestiduras y se presentan como grandes reveladores de verdades que fueron primicias nuestras hace un año.

Cuando se le quemó el pan en la puerta del horno

Era enero del año 2000 y Alejandro Toledo, mediante una llamada telefónica, se pone en contacto con Escardó. Era un candidato de quien se conocía poco y ningún medio de comunicación lo seguía en sus mítines. GENTE, plural como siempre, lo acompañaba a todos lados y por eso se estableció el contacto.

Toledo le solicita a Escardó salir en la portada de GENTE, pero recibe su negativa, tras comentarle que no era el estilo de esta revista. Y es que, a lo largo de los 43 años, en este medio de comunicación casi siempre han sido guapas chicas las que han engalanado nuestras portadas, por lo que sería, en realidad, poco agradable ver "el cacharro" (como él mismo lo califica) del candidato de Perú Posible en una de ellas (perderíamos a un grueso número de lectores y muchos lo hubieran interpretado como si hubiera pagado por ser una portada demasiado traída de los pelos). Es más, Toledo tampoco ganaría nada con ello. No obstante y, ante su insistencia, el ojo clínico de nuestro Director-Fundador le propuso una foto romántica, ya que el estilo magazine de GENTE podía flexibilizarse ante esa posibilidad. "Con tu mujer sí", le dijo, pero Toledo respondió "no, con mi mujer no". No entendimos por qué, tendiendo una esposa tan guapa, no quería posar orgulloso con ella.

Más tarde, el tiempo reveló lo que ocultaban. Es que no eran esposos, estaban divorciados.

Finalmente, ante las explicaciones que Escardó le dio, Toledo fue convencido y es así como GENTE publicó su foto con Eliane Karp en la portada 1315, la misma que no pudo ser más oportuna, ya que subió en las preferencias y semanas después varios otros medios de comunicación hicieron lo propio (copiándonos cuando Toledo daba señales de que podía llegar a una segunda vuelta). Todo iba bien hasta que se hizo público el fuerte rumor de que no eran esposos. Hasta ese entonces, cínicamente, Toledo había confesado que estuvieron separados por un tiempo y que, después de ello, como suele suceder en la mayoría de hogares, se reconciliaron.

Investigamos y conseguimos los documentos en los Registros Públicos. Ellos nuevamente habían mentido. En febrero de 1992 se habían divorciado en Estados Unidos y al momento de publicar nuestra portada no estaban casados. Dimos fe de ello, con pruebas contundentes, como lo constituyen los folios del Tribunal Superior del distrito de Columbia-División de Familia, Washington, donde se consigna la demanda de divorcio presentada por Eliane Karp contra Alejandro Toledo, la misma que posteriormente fue reconocida por el Poder Judicial de nuestro país.

Toledo nos había mentido, pensando quizá que nadie se iba a enterar y que, muy por el contrario, iba a subir fácilmente su popularidad, "haciéndonos los cholitos" al aceptar nuestra portada que, para él, fue un gol de media cancha.

No caímos en su juego y, fieles a la patria, decidimos denunciarlo públicamente. ¿Y qué creen que pasó después? Nos acusó de hacerle "guerra sucia" (¿no les suena familiar?) por haber denunciado esta falta a la verdad. Es más, como sabía que GENTE tiene un gran nivel de credibilidad, seguramente pensó que "comprándonos" nos iba a tapar la boca. Es así como, en una oportunidad, descaradamente envió un mensaje con la reportera asignada a reportar sus actividades en campaña. La "portavoz" le dijo a Escardó que Toledo le había pedido decirle que si nuestro cambio de actitud era por presiones de la Sunat, él podía asegurar que GENTE no tendría ningún problema con esta institución apenas él llegara al gobierno el 28 de julio. De lo contrario, ya se imaginan cuál sería su reacción. Y es que, como es de conocimiento público, la Sunat atropelló a GENTE en varias oportunidades, a tal punto que cualquier amenaza podría fácilmente venir de ese flanco. Escardó, indignado por ese chantaje, no le dio pie a su ofrecimiento y, muy por el contrario, ordenó que GENTE investigara permanentemente éste y otros casos, ya que ese candidato a Presidente se constituía en un verdadero peligro para la sociedad.

Obviamente, todo tiene su precio y, como si se reescribiera la historia, se nos tildó de ser los autores de una guerra sucia en su contra, de estar coludidos con el gobierno, de ser montesinistas y todo lo que ustedes ya conocen que les está pasando a todos aquellos periodistas o medios de comunicación que han decidido no tapar el sol con un dedo, que han tomado el toro por las astas y sacar a la luz las mentiras de Toledo y Karp.

No nos sorprende por ello, como a otros, la actitud de Toledo, quien seguramente estaba confiado en que todos le iban a apañar sus deslices o sus objetivos malintencionados.

Hoy nos detenemos a contemplar cómo Toledo da manotazos de ahogado, ensañándose contra todos, disociando a la clase alta (que vive en el mismo lugar que él) de la media o la baja, creando resentimientos entre los limeños y la gente del interior (cómo se nota que olvida que en Lima todavía habrían varios miles de "limeñitos" que lo respaldan y que seguramente se habrán sentido ofendidos por el tan inoportuno como racista discurso de Eliane) y, sobre todo, tratando de remendar el desmoronamiento de los castillos en el aire que había construido.

Así es pues, quien mal comienza, mal termina. Todo lo que Toledo ha sembrado ayer, no lo cosechará mañana, lo está cosechando hoy, porque el pan se le está quemando en puerta del horno. ¡Que Dios y el pueblo lo juzguen cuando digan su última palabra este 8 de abril con alma, corazón y vida!

¿Se creía mosca?

Tal y como lo hemos señalado, Alejandro Toledo y Eliane Karp se habían divorciado. No obstante, la reportera asignada para la cobertura periodística de las actividades de Alejandro Toledo se había convertido en la "portavoz" de dicho candidato, a tal punto que le reveló nuestra investigación sobre este punto en un momento estratégico.

Es así que, cuando preparábamos nuestro destape sobre la gran mentira de su matrimonio, la portavoz fue de inmediato a comunicárselo. Le dijo que GENTE había descubierto lo del divorcio y que contábamos con pruebas fehacientes que daban fe de ello y que saldrían en el número de GENTE tres días después.

Es por eso que, muy hábilmente, Toledo y Karp se acercaron hasta la municipalidad de La Molina, en donde se casaron por segunda vez.

Esto sucedió tres días antes del 18 de mayo de 2000, fecha en que publicáramos el destape acerca de este tema. De lo contrario, seguramente hubieran esperado el desenlace de las elecciones para decidir si formalizaban su sociedad llamada por ellos (pero no por la ley) "matrimonio". ¿Qué les parece?